Durante los primeros meses de vida del bebé, mientras no puede estar sentado ni moverse, es normal que te preguntes cuál es el mejor sitio para que permanezca mientras estés en casa… ¿hamaca, cuna, carro?

 

 

Aunque a todos nos encanta pasarnos el rato con nuestro bebé en brazos, a lo largo de día existen muchas situaciones en las que tenemos que dejarlo en algún sitio mientras hacemos la comida, vamos al baño, nos duchamos, etc. En estos ratos, hay diversas opciones para dejar al bebé de manera segura, y todas son buenas siempre que sepamos usarlas y no abusar de ninguna de ellas:

 

1- Minicuna o moisés: en las primeras semanas de vida el bebé se pasa el día durmiendo, así que durante este tiempo lo mejor es que le dejes en la minicuna en la que duerme para que pueda descansar siempre que lo necesite. Para estimular sus sentidos, si la minicuna tiene ruedas, puedas moverla de sitio y que así su visión cambie. De este modo, también podrás tenerle cerca si lo llevas al salón o donde estés haciendo cosas.

 

2- Hamaca o columpio: la mayoría de estos objetos pueden usarse desde recién nacido ya que tienen diversas posiciones para que el bebé esté más o menos tumbado según su edad. En los primeros meses debe permanecer tumbado la mayor parte del tiempo para no forzar la curvatura de su espalda. Una vez tenga 4 o 5 meses puede estar más tiempo sentado. Recuerda ponerle siempre el cinturón de seguridad y, si tiene juguetes, dejarle que los use para estimular sus sentidos. Los columpios con movimiento no deben usarse mucho rato.

 

3- Carro: si tienes un cuco o capazo para sus primeros meses de vida, es un buen sitio para dejarle también en casa ya que el pequeño estará cómodo y tumbado para poder descansar de manera segura. Una vez crezca, es mejor que solo uses el carro para pasear.

 

4- Gimnasio o manta de juego: estos juguetes se pueden usar desde recién nacido ya que son blanditos y acolchados, aunque lo normal es empezar a usarlos hacia el primer mes de vida. Debes colocarle y quedarte cerca para poder cambiarle de postura en cuanto se canse o esté incómodo. Son muy buenos para dejar al bebé boca abajo y que así practique a elevar el tronco y fortalecer esos músculos.

 

Una vez el bebé esté sentado o empiece a gatear, debes dejar que juegue y se mueva a su aire, aunque siempre con cuidado de no lastimarse.