¿Tu bebé se ha despertado con los ojos completamente rojos? Aunque la causa más probable es una conjuntivitis o infección de la conjuntiva del ojo, puede haber otros motivos.

¿Tiene conjuntivitis?

La conjuntivitis es una enfermedad muy frecuente en los niños, sobre todo la conjuntivitis vírica, ya que se contagia con facilidad, aunque puede haber varios tipos:

– Conjuntivitis bacteriana: causada por una infección bacteriana, sus síntomas principales son rojez, picazón, dolor, secreción amarillenta e hinchazón leve. Puede afectar a un solo ojo o a ambos. Es necesario tratarla con antibióticos.

– Conjuntivitis viral: causada por una infección vírica, sus síntomas son picazón, ojos rojos y llorosos y puede afectar a uno o a ambos ojos.

– Conjuntivitis alérgica: está causada por una alergia y provoca picazón, ojos llorosos y rojos.

– Conjuntivitis irritativa: se manifiesta con ojos rojos y llorosos después de que el ojo haya estado con un agente irritante (arena, cloro, etc.). En este caso, la rojez desaparece sola en poco tiempo.

Otras causas de ojos rojos

1. Sarampión. Esta enfermedad infecciosa exantemática causada por un virus de la familia paramyxoviridae del género Morbillivirus provoca ojos rojos, además de otros síntomas como fiebre alta, sarpullido rojo, sensibilidad a la luz.

2. Resfriado. Los glóbulos blancos que combaten los virus del resfriado producen sustancias que inflaman los conductos lagrimales y dilatan los vasos sanguíneos, causando enrojecimiento de los ojos.

3. Exceso de exposición al sol. En este caso los ojos rojos suelen ir acompañados de molestias oculares. Recuerda proteger siempre los ojos de tu bebé con gafas de sol y gorros.

4. Abuso de pantallas. Pasar mucho tiempo delante de la tele, la tablet o el móvil puede causar enrojecimiento y dolor ocular.

5. Presencia de cuerpo extraño. Cuando se mete una piedrecita, un pelo o cualquier otra cosa en el ojo, puede causar rojez y lagrimeo continuo por la irritación que se produce en el ojo al estar en contacto con un cuerpo extraño. Si no se pasa la rojez, habría que llevar al bebé al pediatra por si el cuerpo extraño hubiera causado lesión en la córnea.

6. Humo del tabaco. La irritación ocular puede estar causada por la exposición frecuente al humo del tabaco, sobre todo en lugares cerrados. No fumes delante de tu hijo, y menos aún en sitios poco ventilados.

7. Ojos secos. Aunque es poco frecuente en niños, los ojos se pueden resecar al estar en ambientes secos a causa del aire acondicionado o la calefacción.

8. Hemorragia subconjuntival. En este caso la rojez se presenta solo en un ojo y está causada por la rotura de un vaso sanguíneo superficial del ojo a causa de un esfuerzo o un traumatismo. Es una mancha roja que está perfectamente delimitada y es algo muy habitual en los recién nacidos después del parto. Aunque resulta llamativo y preocupante para los papás, no les suele causar ni dolor ni molestias y la mancha desaparece después de unos días sin hacer nada.