BLISS son las siglas de Baby Led Introduction to Solids, una variante del método Baby Led Weaning que pretende mejorar esta manera de introducir la alimentación sólida en el bebé y acabar con los posibles problemas que podría generar al bebé.

 

El método Baby Led Weaning o Alimentación dirigida por el bebé es una manera diferente de introducir los alimentos a partir de los 6 meses. En lugar de ir ofreciéndoselos en forma de puré, introduciendo gradualmente los alimentos según su grupo, el BLW se basa en dejar que sea el bebé quien decida qué quiere comer de entre una serie de alimentos en trocitos que se le ofrecen, para que sea él mismo quien los vaya cogiendo, saboreando y probando. Nada de purés.

 

El problema de este método, muy seguido actualmente, es que hay expertos que afirman que puede dar lugar a una serie de problemas en el bebé si no se lleva a cabo de manera adecuada, como atragantamiento; falta de hierro ya que los alimentos que se ofrecen al niño no suelen tener mucha cantidad de este mineral; y crecimiento escaso e insuficiente.

 

Para resolver estos inconvenientes que puede presentar el BLW se ha creado el método BLISS, basado en los siguientes puntos:

 

– El bebé debe estar alerta mientras come, nada de distraerle con la televisión.

 

– Siempre debe haber un adulto vigilando al niño mientras come, no se le debe dejar solo.

 

– Se debe probar la comida antes de ofrecérsela para asegurarse de que la textura y la temperatura son adecuadas. La comida debe estar suficientemente blanda para poder aplastarla entre la lengua y el paladar.

 

– Hay que evitar comidas que puedan hacerse bola.

 

– El alimento debe tener al menos un lateral tan largo como el puño del bebé para que este pueda agarrarlo sin problemas y sobresalga una parte para que la pueda chupar.

 

– Elimina de su dieta alimentos duros o redondeados como frutos secos, uvas, manzana, etc.

 

– El bebé debe estar siempre bien sentado y erguido.

 

– La comida se le ofrece, nunca se le mete en la boca.

 

– El bebé debe comer con toda la familia para que vaya aprendiendo de vosotros.

 

– En cada comida hay que ofrecerle al menos un alimento rico en hierro (legumbres, carne roja, semillas, cereales…), uno rico en energía y fruta o verdura. Es decir, entre 3 y 4 alimentos diferentes por comida.